VIVIENDO LAS JORNADAS DE DIFUSIÓN DEL PATRIMONIO

Santiponce
Encuentro de culturas
Viacrucis del Aljarafe San Isidoro del Campo
Lugar de encuentro

7 oct 2010

Camino de Santiago. Ruta de la plata, etapa 1

La aventura de la peregrinación a Santiago por todo el oeste peninsular, más de mil kilómetros, comienza a las puertas de la Catedral de Sevilla. Concretamente junto a la puerta de la Asunción, sita en la Avenida de la Constitución de la ciudad andaluza. La primera cerámica con vieira nos guía por la calle García de Vinuesa para continuar por las calles de Jimios, Zaragoza, Reyes Católicos y cruzar el Puente de Isabel II por el que se accede al popular barrio de Triana. Recorremos Triana por las calles San Jorge, Callao y Castilla, donde se encuentra la Capilla del Cachorro. Unos metros más adelante hay un Kiosko y, a su derecha, una rampa y unas escaleras por las que se accede a la autovía.

Cruzamos y, tras bordear una rotonda, bajamos hacia un aparcamiento y pasamos un puente peatonal sobre el Guadalquivir. Surge la alternativa, bien indicada, de ir hacia la población de Camas o continuar por un camino paralelo al río. Nosotros escogemos la que avanza por la ribera del Guadalquivir. No da tiempo a saborearlo porque en algo más de un kilómetro y medio, a la altura de unas casas antiguas con una perrera en el exterior - del siglo XIX y conocido como Cortijo de Gambogaz - las flechas abandonan el río y se internan por una senda a mano izquierda. ¡Atención a este desvío!

Avanzamos por este camino, teniendo como referencia Camas y el Cerro de Santa Brígida, situados a nuestra izquierda. Hay que pasar debajo de la A-66, conocida como la Autovía de la Plata, un par de veces y, entre medias, bajo el puente del ferrocarril. A lo lejos ya se puede observar la estructura del Monasterio de San Isidoro del Campo, cisterciense del siglo XIV. En Santiponce podemos detenernos a ver el monasterio o continuar más de kilómetro y medio por el pueblo hasta la entrada al Conjunto Arqueológico de Itálica. Las ruinas y el anfiteatro de esta ciudad romana, fundada en el 206 a.C. y cuna del emperador Trajano, bien merecen una visita. Itálica supondrá para los peregrinos el primer hito romano de la Vía de la Plata y continuaremos hasta Mérida siguiendo el trayecto de la calzada que unía esta localidad extremeña con la desembocadura del Guadiana.


La etapa continúa por la A-8078, carretera sin arcén por la que transitamos algo más de un kilómetro. Llegamos a una rotonda, cruzamos la N-630 y seguimos en dirección a La Algaba pasando bajo la autovía. Sólo unos cientos de metros porque las flechas se desvían a la izquierda y continúan por una amplia pista de servicio. Una recta sin fin entre campos de algodón donde cuatro kilómetros más adelante cruza el cauce del Arroyo de los Molinos. Si trae agua la solución pasa por descalzarse y ponerse las chanclas de la ducha para vadearlo. Normalmente no cubre más de un palmo pero hay ocasiones en que es imposible pasar al otro lado y hay que buscar otra solución. Algunos peregrinos nos han informado de que 100 metros antes del arroyo hay un camino a mano izquierda que conduce hasta la misma N-630, carretera que habría que seguir hasta Guillena.
Después del "baño" y Guillena ya en el horizonte, continuamos en línea recta por la pista. Pasados tres kilómetros y medio giramos a la derecha, al llegar a un inmenso campo de cultivo. Dos kilómetros más adelante salvamos el cauce de un arroyo del Rivera de Huelva y nos presentamos en Guillena. Por las calles Portugalete y Real llegamos a su Ayuntamiento.