Santiponce.

 

PROVINCIA: Sevilla

DISTANCIA A LA CAPITAL (km): 7

ALTITUD NIVEL DEL MAR (m): 18

EXTENSIÓN (km2): 8

Nº DE HABITANTES:  8.000

GENTILICIO: Poncinos

CÓDIGO POSTAL: 41970

  

         La Villa de Santiponce,  escenario donde se ubica  una de las más florecientes ciudades  romanas de la Península Ibérica,  se sitúa a sólo 7  Kilómetros de Sevilla capital.  

          Este pueblo tranquilo, de casi 8.000 habitantes,  conserva  en  su seno uno de los mayores Anfiteatros del mundo, un Teatro romano  y un Monasterio asentado  bajo el precioso azul del Aljarafe sevillano.

        

         Su casco urbano, cuyas casas encaladas  atesoran la blancura y luminosidad de los pueblos del sur, guarda el secreto que hace de los 
andaluces un pueblo tranquilo, amable y hospitalario.

 HISTORIA

         Santiponce  ha sido asentamiento de distintos pueblos a lo largo de  la historia,   descubriéndose en sus inmediaciones restos prehistóricos, íberos, turdetanos, etc.  Pero  su
gloria  comienza cuando el General romano Publio Cornelio Escipión, “El Africano”, victorioso s
obre Cartago, funda una ciudad  para descanso y  restablecimiento de sus tropas.

        

         Itálica, cuyo nombre rememora el origen de sus fundadores, nace en los primeros momentos de romanización hispana. Los vínculos del imperio con esta floreciente  ciudad serían estrechos. Roma pronto concederá la ciudadanía a la población  y en ella  vivirán dos de los hombres llamados a dirigir el Imperio, Trajano y Adriano. 

        

         Con el devenir histórico Itálica queda relegada a un sueño del que ya no despertará. Entre sus ruinas  se  levantan las Escuelas Episcopales de San Leandro,  y  en tiempos de la Reconquista  los mozárabes  construyen  una Ermita en honor a San Isidoro  de Sevilla, enterrado en ella hasta su traslado a León, donde reposa actualmente.

        

         En el año 1.301 comienza la edificación del Monasterio de San Isidoro del Campo, que se convertirá en un  Señorío del que dependía el originario núcleo de población poncina, asentado en la llamada Isla de Hierro, a orillas del Guadalquivir. Pero las crecidas del río adelantarán  su  destrucción. En el año 1.603 el lugar llamado “Sevilla la Vieja” quedará sumergido por las aguas, abandonando definitivamente sus moradores el lugar, y buscando la protección de los monjes del Monasterio de San Isidoro del Campo, quienes les cedieron tierras más altas para la construcción de sus casas. El nuevo Santiponce se edificará casi en su totalidad sobre las ruinas de la “Vetus Urbs”, núcleo originario de la ciudad de Itálica.